La semana pasada, un amplio frente de entidades que representa intereses patronales realizó una presentación ante la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo de la Capital Federal. Solicitan que se suspenda la vigencia del Acta 2764/22 de esa dependencia de la Justicia laboral, que establece el cálculo de las tasas para las actualizaciones de los montos a abonar por las empresas en casos de indemnizaciones por despidos.
El frente patronal que realizó la solicitud está integrado por el Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA), la Unión Industrial Argentina (UIA), la Cámara Argentina de Comercio y Servicios, la Asociación de Fábricas de Automotores (ADEFA) y el Colegio de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires. También enviaron a la Corte Suprema de Justicia de la Nación una nota advirtiendo sobre esta situación.
Para decirlo con claridad: los patrones se quejan de tener que pagar las indemnizaciones, luego de años de litigio, con un sistema de cálculo que incorpora las tasas de interés, en lugar de hacerlo sobre la evolución de los salarios (RIPTE) o la inflación (IPC). Esto se entenderá mejor con los números del cuadro que está más abajo.
Observamos que el reclamo no se centra en la duración extremadamente prolongada de los juicios, causa principal en el crecimiento de los intereses tasados. Y es que esa larga duración de los juicios laborales forma parte de la estrategia burguesa dirigida a doblegar, por vía de la miseria, la resistencia de los trabajadores y a forzar acuerdos favorables para la patronal. Por eso lo único que los burgeses reclaman es que no se incorpore, al cálculo de la indemnización, la tasa de interés. Porque al incorporar la tasa de interés al cálculo de las indemnizaciones, los burgueses se pierden el negocio de obtener esos mismos intereses por los depósitos durante los años que dure un juicio.
Es buen negocio no pagar y forzar el juicio, tal como lo expone El Economista, en tres tablas:
La primera tabla es la de Casos Hipotéticos: casos 1, 2 y 3, que tienen el mismo monto a pagar a un obrero despedido en tres fechas anuales distintas (2016, 2017 y 2018). En la segunda tabla se compara el cálculo de la indemización que incorpora el Índice de Precios al Consumidor (IPC) con el cálculo según el Acta 2764: las columnas Diferencia y Proporción muestran el dinero que se están perdiendo los patrones con la legislación vigente. En la tercera tabla se realiza la misma comparación pero con la evolución salarial (RIPTE) en lugar de la de precios (IPC): el negocio que la burguesía se está perdiendo en este caso es el doble, comparado con la tabla anterior.i
Estas cámaras empresariales no se cuestionan por no pagar lo que corresponde. A fin de cuentas, eso es lo que significan estos fallos: que no quisieron pagar pero debían hacerlo. Lo que cuestionan es un mecanismo de cálculo que no les permite apropiarse de esa diferencia que, como exponen los ejemplos en las tablas, oscila entre un 25% comparado con los precios en un trámite judicial de 5 años, hasta llegar al 68% en un trámite de 7 años contrastado con la evolución salarial. Es claro que si el trabajador hubiera cobrado la suma en el momento que correspondía, habría tenido la opción de ponerlo a interés y acumular hoy la suma que las patronales consideran exorbitante. Lo que está en disputa no es la justicia sino un negocio.
Es obvio que patalean porque quieren quedarse con una parte de lo que nos corresponde y no pueden. Pero presentan el problema de una manera en la que no parece tan obvio. Por ejemplo, El Economista explica que «las entidades» (o sea, las patronales) «manifiestan» (son manifestantes, por supuesto, de la clase explotadora):
…la honda preocupación que existe, entre los dadores de trabajo, con relación a los métodos de actualización de las liquidaciones que surgen de las sentencias de condena que se pronuncian en ese fuero. Estamos convencidos de que esas actualizaciones están dañando seriamente a las empresas, generando perjuicios y distorsiones que muchas empresas ya no pueden afrontar.ii
Es curioso ese lenguaje, que habla de los explotadores (que compran fuerza de trabajo y la pagan por debajo de su valor) como si fueran «dadores de trabajo». Más curioso todavía resulta que se los llame así en el contexto de las indemnizaciones, que implican la obligación de pagar por despedir trabajadores (exactamente lo contrario de «dar trabajo»). Pero el colmo de las curiosidades es que presentan sus demandas de clase como si favorecieran a los trabajadores en general, que somos precisamente los perjudicados:
Es una creencia compartida de las entidades que representamos en el sentido de que ese mecanismo de cálculo tiene efectos extremadamente nocivos para la industria, el comercio y los trabajadores en general.
Sin embargo, hay que reconocer y destacar que la burguesía sabe hacer política. Mientras por un lado monta el circo electoral, por el otro no deja de presionar para arrebatarnos conquistas e incrementar sus beneficios. Y mientras eleva notas y propuestas a las autoridades estatales, los distintos medios que poseen difunden la noticia como si se le estuviera quitando un pan de la boca a los niños famélicos del continente:
Lo que ha hecho la CNAT [Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo] es ni más ni menos que populismo del más básico. Ha ordenado, a una de las partes de un juicio, asumir el total del costo inflacionario, como si ella fuese la responsable de ese costo. Una verdadera falacia sin sustento alguno en la bibliografíaiii
Pero el Acta 2764, contra la que cargan, no deja lugar a dudas acerca de que la «verdadera falacia» es la argumentación de los empresarios:
La tasa a aplicarse, para ser justa y razonable, debe compensar adecuadamente al acreedor por la falta de goce del capital en tiempo oportuno, a la par de absorber –aunque sea mínimamente– los daños derivados de la mora del deudor, así como también los provocados por la pérdida del valor adquisitivo de la moneda habida desde la exigibilidad del crédito.iv
Como suele ocurrir en todo berrinche, el de estos empresarios se completa con un dato de color, un testimonio incierto y exagerado, desmentido por los propios cálculos que realizaron para la presentación ante la justicia (los cálculos de las tres tablas). Un testimonio ficcionado que sirve para enseñarle al resto de la burguesía que es necesario unirse contra los trabajadores, maléficos responsables del trágico destino del país:
«Tuve un juicio, el único en 25 años, y la contraparte nunca quiso negociar. Luego de 9 años salió esta sentencia que me obligó a pagar 300.000 pesos, pero con los intereses llega a casi 15 millones de pesos. No puedo afrontarlo, ni cerca. Ahora soy empleado, tengo 63 años y no sé cómo va a terminar esto. Apelamos y vamos a esperar, pero esto es una locura total. Se van a fundir a muchísimas pymes».
Los burgueses saben hacer política de la misma manera que saben hacer negocios. Por eso, hoy, ahora mismo, no están esperando a que lleguen las elecciones. Están votando, en este preciso instante, a sus candidatos. Pero no por la vía democrática «una persona igual a un voto». Sino por la vía antidemocrática que asiste a los dueños del capital: el poder del dinero. Así describe TN cómo actúa, políticamente, la burguesía en una situación incierta como la actual:
«Yo miro por la ventana y sólo veo un vidrio empañado. No tengo claro, no puedo distinguir bien lo que hay del otro lado. ¿Entonces qué hago? Aporto a todos«. El que habla es uno de los quince empresarios más importantes de la argentina si medimos la cantidad de empleados, producción y facturación. Sigue su razonamiento con la mirada en la ventana del living de su oficina amplia y luminosa. Del otro lado solo hay sol y árboles, pero él amplía: «Esto está muy confuso, muy esmerilado y yo tengo que asegurarme el día después de la elección así que sí, ayudo a Larreta, a Bullrich, a Milei y a Massa también«. Este hombre de negocios es una de esas personas claves que cualquier candidato quiere seducir para financiar su campaña y expresa con pragmatismo total lo que está pasando ahora mismo con el escenario electoral: cualquier cosa puede pasar. Si tomamos a los indecisos como si fueran una candidatura, ya no sería una elección de tres tercios sino de cuatro cuartos: un 25% de la gente no tiene idea qué va a hacer. Es más, son argentinos a los que el mes y algo que falta para las PASO les parece una eternidad, una meta a la que ni siquiera les interesa demasiado llegar. Y todos los encuestadores de todas las ofertas políticas sostienen sólo una certeza: que habrá balotaje. La pregunta, totalmente incierta claro, es quiénes llegarán a esa gran final.v
Mientras las trabajadoras y trabajadores nadamos en un mar de incertidumbre, viendo en todas direcciones la niebla en el horizonte, con un calendario electoral del que no podemos esperar ninguna solución duradera para nuestros problemas vitales, los burgueses militan diariamente por los intereses de su clase. Y mientras las organizaciones gremiales de la burguesía comandan el lobby y las presiones en su beneficio, la CGT apoya a un candidato de esa misma clase burguesa: «Vamos a trabajar para que [Massa] sea presidente», declaró Gerardo Martínez (OUCRA).vi
Hace mucho tiempo que la burguesía rige los destinos sociales aquí y en el mundo. Sin ceder en nada a nuestra enconada oposición a la clase enemiga, tenemos mucho que aprender de ella. Una de las enseñanzas que nos brinda es cómo hacer política: actuando hoy.
Cuando los burgueses nos piden paciencia, que tengamos esperanza, que ya vendrán tiempos mejores, que el momento de elegir y mejorar las cosas es el día del sufragio… nos ocultan que ellos hacen política todos los días, sin descanso, sin tregua. Erigen candidatos con su dinero, presionan con sus asociaciones gremiales y difunden incansablemente la cosmovisión según la cual ellos son las víctimas que generosamente nos «dan laburo», mientras que los trabajadores somos los ambiciosos e intransigentes destructores de la armónica vida social capitalista.
Los burgueses, los patrones, siempre hacen política. Día y noche, todo el tiempo. No los podemos derrotar con un entusiasmo que, como los 29 de febrero, se hace presente cada 4 años.
NOTAS:
i https://eleconomista.com.ar/negocios/intereses-exorbitantes-pagos-juicios-laborales-pedido-desesperado-empresas-justicia-n63996
ii https://www.ambito.com/economia/entidades-empresarias-piden-que-se-cambie-la-tasa-que-encarece-manera-exorbitante-los-juicios-laborales-n5764538
iii https://www.infobae.com/economia/2023/07/07/industria-del-juicio-los-ejemplos-que-muestran-como-una-nueva-norma-incremento-las-demandas-laborales-de-manera-exorbitante/
iv https://aldiaargentina.microjuris.com/2023/01/20/fallos-intereses-en-un-fallo-dividido-la-mayoria-de-sala-ii-de-la-cnat-se-aparta-de-las-nuevas-disposiciones-emergentes-del-acta-cnat-2764-22-en-tanto-sugiere-un-modo-de-aplicacion-de-la-capitaliza/
v Newsletter de TN Noticias 7/7/23
vi https://tn.com.ar/politica/2023/07/11/la-cgt-se-reune-hoy-para-limar-asperezas-tras-el-cierre-de-listas-y-blindar-la-candidatura-de-sergio-massa/?utm_source=emBlue&utm_medium=email&utm_campaign=Diario%202023&utm_content=Hoy%2011-07-23–La%20estrategia%20electoral%20de%20Massa,%20la%20reuni%C3%B3n%20de%20la%20CGT%20y%20los%20partidos%20del%20lunes&utm_term=Usar%20TN%20Toda%20la%20Base%20sin%20inactivos–7–none–80-90–ENVIO%20SIMPLE&embtrk=9a:i-R-71278553-R-5g9al68-R-7a2el59
